Todos sabemos que el nombre de una persona, lo identifica y lo define. Por eso, cuando empezamos un nuevo proyecto, desarrollo de producto o servicio o fundamos una empresa necesitamos nombrarlo.
Ese nombre buscamos que sea el mejor, el que todos puedan reconocer, el que se va a destacar. Estamos otorgando identidad, transformando un sueño en algo concreto…
Antes de definir el nombre…sugerimos algunas recomendaciones a tener en cuenta al elegirlo:
- Un nombre tiene que destacarse: Romper códigos, sonar diferente.
- Es fundamental porque es la “carta de presentación”….la primera impresión.
- Puede ser descriptivo, pero eso restringe la extensión a otras categorías.
- Debe ser coherente con las otras marcas de la empresa.
- Ser fácil de recordar, pronunciar y escribir.
- Tiene que ser evocador de aspectos positivos y que se quieren transmitir desde la empresa.
- Conviene generar varios nombres, porque tiene que ser registrable en marcas y en NIC.
Fundamentalmente, el nombre tiene que tener vida, debe poder contar una historia y hay que comentarlos con todos los cercanos para ver cómo suena.